Los norteamericanos Halestorm vuelven este año con su nuevo trabajo Everest, para demostrar que aún tienen mucho que ofrecer dentro de la escena y evolucionar un poquito respecto a sus dos trabajos anteriores.
Y lo cierto es que al escuchar el álbum en repetidas ocasiones, está claro que la banda ha querido poner un punto y aparte respecto al sonido que tenían en discos como Vicious y Back from the Dead, que si bien no estaban mal ni mucho menos, si que carecían de la magia que tenían sus dos primeros discos y generaron cierta preocupación al pensar que Lzzy Hale y los suyos se podían estar estancando musicalmente.
Las dudas se despejan al instante cuando al pulsar play uno escucha las primeras notas de "Fallen Star", un intenso, pesado y muy bien ejecutado corte, dan el comienzo deseado al disco.
Pero conforme avanza el disco, podemos ver las distintas variantes de Halestorm, desde la riqueza compleja del corte que da título al disco, la belleza sonora de "Shiver" con un gran trabajo en las guitarras y la sensualidad que Lzzy dispara en "Like a Woman", donde el mensaje sobre el empoderamiento y la valoración de la mujer como se merece es más que acertado y lo acompaña con un tono vocal impecable.
Por supuesto que hay lugar para el lado más "Heavy" de la banda norteamericana y esto se pone en evidencia con la incendiaria "K-I-L-L-I-N-G", un cañonazo que seguro suena de muerte en directo y que nos muestra que no deberías pensar en Lzzy como una simple "Cara Bonita", ya que esta chica tiene los ovarios mejor puestos que muchos de sus compañeros masculinos de profesión.
Ahora si, con este nuevo disco, Halestorm vuelven a recuperar la chispa y la inspiración de antaño y esperemos les dure muchos años más y nos sigan regalando obras tan interesantes y cañeras como esta.